El Torrezno de Soria está a tan sólo un paso de conseguir la Indicación Geográfica Protegida (IGP), casi cinco años después de que la Marca de Garantía iniciara los trámites hacia este reconocimiento que concede la Unión Europea a los productos de una calidad diferenciada. Una figura de protección que le va a dar «todo un espaldarazo en las exportaciones», según explica el presidente de la Asociación de Fabricantes del Torrezno de Soria, Samuel Moreno.

 

Y es que las ventas al exterior es el reto pendiente de la agrupación, impulsora del proceso que arrancó en 2013 con la Marca de Garantía de la mano de la Cámara de Comercio de Soria, y que en este tiempo ha visto multiplicar por ocho su producción, pasando de los 369.371 kilos en 2014 (primer año completo de la marca) a los 2.924.162 kilos diez años después. Pero es que además en el primer semestre de 2024 se han alcanzado los 1.743.355 kilos, de modo que se confía en cerrar el año superando los 3.500.000 kilos. Actualmente son nueve las industrias dedicadas a la fabricación de torrezno que cuentan con la certificación de la Marca de Garantía Torrezno de Soria (aunque son once las incluidas dentro de la Asociación de Fabricantes).

 

Ahora, con la publicación en el Boletín Oficial del Estado de la protección nacional transitoria que concedió el Instituto Tecnológico Agrario de Castilla y León (Itacyl) a la IGP Torrezno de Soria, sólo queda que se ratifique en Bruselas, y una vez se inscriba en el registro deberá publicarse en el Diario Oficial de la Unión Europea (DOUE). Además, cabe recordar que precisamente el martes 22 de octubre finalizó el plazo para presentar alegaciones al proceso. «No nos consta ninguna oficial, de modo que ya sólo queda que Europa dé el visto bueno y lo publique en las próximas semanas», indica el director técnico de la Marca de Garantía Torrezno de Soria, Juanjo Delgado Soto.

 

El Diario Oficial de la Unión Europea (DOUE) recogió el 22 de julio la publicación de solicitud de registro como Identificación Geográfica Protegida (IGP) del Torrezno de Soria, y a partir de entonces se abrió el procedimiento de oposición comunitaria, que duró tres meses. Una vez superado favorablemente, la IGP podrá inscribirse en el Registro de Denominaciones de Origen Protegidas (DOP) y de Indicaciones Geográficas Protegidas (IGP). Mientras tanto, la Asociación de Fabricantes de Torrezno de Soria acordó por unanimidad en su última asamblea general, celebrada el pasado 16 de septiembre, solicitar al Itacyl la protección nacional transitoria, una salvaguarda de carácter voluntario concedida sólo de forma transitoria y a escala nacional, a un nombre con efectos desde la fecha en que se haya presentado la solicitud de registro de ese nombre a la Comisión. «La ventaja es que aunque la IGP no esté registrada a nivel comunitario, sí goza de protección a nivel nacional». Una protección que cesará a partir de la fecha en que se tome una decisión definitiva. Una vez que la Comisión Europea publique en el DOUE la inscripción en el registro llega, a juicio de Juanjo Delgado, «el momento más importante para el Torrezno de Soria porque hay que tomar decisiones estratégicas», como la elaboración del reglamento del Consejo Regulador. Además, se tiene que constituir el Consejo Regulador, figura que se considera ‘Organismo de Derecho Público’ y que estará bajo la tutela de la Junta de Castilla y León.

 

Así con todo, el director técnico de la Marca de Garantía estima que «para finales del primer trimestre de 2025 o principios del segundo las empresas puedan certificarse en la IGP y comenzar a comercializar el producto certificado».

 

Para el presidente de la Asociación de Fabricantes del Torrezno de Soria, Samuel Moreno, «es un revulsivo importante de cara a la exportación, porque con esta figura de calidad, además de darle una mayor protección al producto, le da un mayor prestigio de cara a la confianza del consumidor». En este sentido, Juanjo Delgado recuerda que con la Marca de Garantía el Torrezno de Soria ya tenía un reconocimiento a nivel regional y nacional, pero con la IGP «es un ascenso a la Primera División y a la Champions de la calidad alimentaria». Porque el vínculo entre la zona geográfica delimitada y el producto Torrezno de Soria se basa en su reputación y en las características específicas del producto que tienen su origen en la tradicional matanza en Soria.

 

Fuente: Diario de Castilla y León